quarta-feira, 15 de julho de 2009

O Reboliço é um nefelibata (13)


Nubes (II)

Por el aire andan plácidas montañas
o cordilleras trágicas de sombra
que oscurecen el día. Se las nombra
nubes. Las formas suelen ser extrañas.
Shakespeare observó una. Parecía
un dragón. Esa nube de una tarde
en su palabra resplandece y arde
y la seguimos viendo todavía.
Qué son las nubes? Una arquitetura
del azar
? Quizá Dios las necesita
para la ejecución de Su infinita
obra y son hilos de la trama oscura.
Quizá la nube sea no menos vana
que el hombre que la mira en mañana.

Jorge Luis Borges, Los Conjurados (1985)
Uma versão portuguesa,
de Fernando Pinto do Amaral,
está em Obras Completas III, Círculo de Leitores, Lisboa, 1998, p. 504.